Máxima velocidad…

Claro está que las últimas semanas han sido vertiginosas y hemos podido apreciar las torpezas y chambonadas al por mayor cometidas por el “gobierno de excelencia”.
Han actuado, como ya se ha dicho, con la delicadeza de un elefante en una cristalería. Pasamos de “sueldos reguleques”, según la ex vicepresidenta ejecutiva de la Junta Nacional de Jardines Infantiles (Junji) Ximena Ossandón, a puentes que valen “callampa” según el “renunciado” Jaime Ravinet ahora ex ministro de defensa o “champiñón”, para los más finos, a un abrupto cambio de gabinete, que a decir verdad se veía venir.
Las movilizaciones generadas en Magallanes a raíz del alza del gas de un 16,8% anunciada por el entonces ministro de energía Ricardo Rainieri quien manifestó que: “a los magallánicos se les acabó la fiesta”, precipitaron un ajuste ministerial que había sido negado por el ministerio del interior, ya que hasta ese momento los ministros de las distintas carteras eran los más “calificados”.
Hoy vemos que el movimiento telúrico producido en palacio generó cambios en los ministerios de energía, defensa, trabajo, transportes y nos ha dejado, como bi ministro, energía y minería, al mismísimo Lorence Golborn…el mismo que rescató a los mineros y que goza de tanta popularidad y autor intelectual, junto a Rainieri, del alza del gas que ha movilizado a los magallánicos, es decir él fue parte de la generación del problema y debe arreglar el entuerto. En todo caso poco o nada le están ayudando desde la moneda ya que el ministro del interior amenazó con la aplicación de la Ley de seguridad interior del estado a quienes dirijan las protestas. El mensaje es claro, quienes no acaten calladitos y sin chistar las medidas del gobierno, por muy injustas y arbitrarias que estas sean serán, al igual que en dictadura, procesados por dicha Ley.
¿Qué ocurrirá en los meses venideros cuando los trabajadores tengan que negociar por un reajuste del sueldo mínimo y lo tengan que hacer con una ministra del trabajo como Evelyn Matthei, ex militante de Renovación Nacional y ex senadora UDI, otrora enemiga personal de su excelencia, que mientras estuvo en el congreso jamás votó a favor de alguna ley que les favoreciera?, ¿tienen ellos alguna esperanza de resolver sus demandas? o a los estudiantes, jubilados, mapuche, o a todas las fuerzas sociales organizadas …¿también se les aplicará la ley de seguridad interior del estado para acallar el descontento? Tengo la impresión que junto a la hiperactividad de “ su excelencia ” y su nula capacidad de contener su verborrea, que en sus últimas intervenciones ante el conflicto del gas en Magallanes, le extendió un certificado de defunción al salitre chileno diciendo que se había terminado en el siglo XIX, lo que obviamente no es cierto, nos viene la represión; una represión a la que, en todo caso, enfrentamos en dictadura y que, estoy segura, aún no se nos ha olvidado cómo hacerle frente.
Al nuevo ministro de defensa Andrés Allamand ¿se le ocurrirá algún nuevo libro como “El desalojo”? o ¿tendrá una nueva edición su libro “Travesía por el desierto” ?donde explicaba su “autoexilio” en los Estados Unidos tras su derrota electoral en 1997?
La Asamblea Ciudadana creada en Magallanes es un ejemplo de organización y lucha para todo el país a la cual se pretende intimidar y llamar a negociar con una pistola sobre la mesa, con amenazas y nula intención de generar un real acuerdo.
La actitud el “gobierno del cambio, el futuro y la esperanza ”, a menos de un año de asumir su mandato, nos ha demostrado que no cumplen sus promesas, que gobiernan según las encuestas, que aparte de ser encabezado por un personaje mediático, no han aprendido cómo gobernar en democracia ni menos evitar poner en sus ministerios a personajes que cumplen el papel de gerentes y no de servidores públicos.
La administración Piñera ha tomado decisiones que involucran a todos los chilenos como en una empresa privada, beneficiando a otros empresarios, sin tomar en cuenta el bien superior de todos los chilenos, la danza privatizadora recién comienza, la complicidad de los parlamentarios de la concertación nos muestra que en los hechos que es la ciudadanía organizada e informada la llamada a parar la fiesta neoliberal de la “patrulla juvenil” de la que seremos parte, pero sólo, cuando haya que ir a limpiar los salones y recoger la basura.
Andrea Dufournel
Temuco.