martes, 7 de junio de 2011

¿Qué implica el llamado a la unidad gobierno- concertación?

Luego de una profunda meditación del presidente en la península itálica, durante su prolongado weekend familiar, y de haber gobernado al país vía twitter, llegó con la firme convicción de que la única salida a la baja popularidad de su administración es llamar a sus ministros, reprenderlos y ponerlos en cintura para que no sigan discutiendo mediante un concierto de declaraciones muy desentonadas, y rápidamente comiencen a afinar los instrumentos para que la banda suene un poco más  rítmica, pero, ojo, esto no puede hacerse sin el llamado a la oposición, léase Concertación, a que colaboren para que la musiquilla oficialista sea más agradable ayudando así a aplacar los ánimos de la sociedad civil que se está haciendo incontrolable.

Durante 20 años de gobiernos “democráticos”, en que se administraron y terminaron de ajustar las clavijas del sistema neoliberal, sistema al cual ya no hay qué perfeccionar: está instalado… ni siquiera hay que retocarlo, simplemente la tarea es continuar administrándolo tal y como se ha venido haciendo, o ¿es que a alguien de los que dejaron el poder, con la impresión de la derrota vio la luz y,  le parece ahora que el sistema es perverso y que hay que modificarlo?.
Frente a lo que acontece en el país y ante las enérgicas movilizaciones, sin conducción de algún partido o dirigente conocido, sino que, simplemente es la sociedad organizada gracias en parte a las redes sociales, que ha salido a la calle generando la preocupación, no sólo del gobierno que las ha mandado a reprimir brutalmente, sino también, la de los partidos de oposición que ven que se han transformado en furgón de cola de los movimientos sociales, que su mirada al pueblo la han hecho desde una suerte de Olimpo en que los problemas del país real no existían y sólo ahora, de una cachetada, logran ver.

Nos enfrentamos a un profundo movimiento ciudadano, encabezado por profesionales, estudiantes, trabajadores, ambientalistas que otrora logró cambiar leyes  y cambiar gobiernos, nuevamente vemos como toma fuerza el mochilazo de los estudiantes secundarios que exigen profundas reformas al sistema educacional. Todo lo anterior es una ocasión  para que los políticos no dejen pasar la oportunidad de empoderarse, de verdad, sin el oportunismo clásico que hemos visto hasta ahora, y lograr que  la legitimidad de sus planteamientos sea reconocido por el pueblo ya que, la Concertación de ninguna manera ha promovido este proceso ciudadano, sino al contrario lo ha estado frenando y paralizando. Sólo lo ha utilizado para obtener votos populares.

El llamado a la unidad que ha hecho Piñera implica una invitación explícita a la Concertación a llegar a acuerdos que, están incluidos en la política de los acuerdos y alternancia en el poder, sistema que, por cierto, no les incomoda. Los verdaderos cambios que se deben realizar deben, necesariamente, incluir la derogación absoluta del sistema binominal, que no da lugar a que buena parte de la sociedad esté representada en  el parlamento, otorgándole legitimidad a una constitución política que es ilegítima desde su concepción. La oportunidad es ahora, en que el sistema económico nos ahoga y que, a quienes gobiernan, no les queda más que entregar bonos en vez  de generar los cambios.
Los anuncios populistas que plantean la creación de nuevos ministerios, secretarías y subsecretarías,  terminarán por  convertir al estado en un aparato aún más burocrático que hace muy difícil la relación de los chilenos con el gobierno, no dan solución a los problemas, sólo dan la oportunidad a quienes los manejan para darle un mordisco más a la pequeña, pero tan apetecida  torta del poder.


Andrea Dufournel
Temuco.

No hay comentarios:

Publicar un comentario